Endogàmia Virtual

Estimados colegas,

Sabéis bien que no me gusta criticar, sabéis que me encanta. Por ello, y sin perder más el tiempo, me dejo de florituras y paso a la faena de estoque, así, sin banderillas ni picador:
Je acuse a TV3 en su intento por desmoronar un modelo sólidamente establecido, guía y faro para los pasos de muchos que, ahora, se sentirán perdidos y desamparados en su búsqueda de un modelo vital. Hasta hace muy poco, casi todos teníamos bien claro en nuestro imaginario al hombre homosexual como un modelo de saber hacer y estar, de elegancia y sofisticación a la vez que un ser inquieto y culto, que valoraba no sólo lo externo del físico sino también lo interno del alma y el espíritu de aquéllos que le rodeaban. Hasta hace bien poco también sabíamos que un metrosexual era aquél que, sin practicar en lo privado, hacía de los valores del gay cosmopolita su decálogo vital. Por ello me pregunto, ¿a qué este intento de disolución de tan válidos modelos, a qué viene este deseo de confusión? ¿Por qué TV3 contrata y otorga tiempo y voz a seres como Àngel Llatzer y sus colaboradores? ¿Acaso desean destruir esa imagen que tanto hemos tardado en aceptar para volver a las viejas maneras? ¿Se pretende demoler la imagen amable y refinada que el colectivo gay tanto ha luchado por construir, mediante la publicitación de la irritante corte de los milagros de Àngel, en la que la cojera sin disimulo se alterna con el chismorreo de burdel en un espacio que se pretende divertido e innovador?

Sin más que decir, me despido indignado.